algunas veces bailan desnudas
A un lado de la ventana una estatua
perfecta de pájaro
todo es quietud en ese aleteo ausente
al otro lado y hacia adentro alguien
escribe
suena esa voz que busco desde el primer
poema
se esconden las agujas detrás del péndulo
solo las palabras danzan en un juego
parecen un fresco de Degas
tomadas de las manos bailan despojadas
sin ropas
sin dueños.
© Ricardo Di Mario
Las palabras tienen vida propia !!! MIR Venezia
ResponderEliminarSensibilidad y ternura. Y esa búsqueda que solo los poetas conocen.
ResponderEliminarSusana Giraudo
Las palabras como pájaros. Hermoso poema, Ricardo. Gracias.
ResponderEliminarGuau, dos Susanas que admiro, gracias por vuestra lectura. Les envío mi corazón!!!
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