Poema de Diana Espinal Meza
Aquel hombre
tenía en su corazón
un epitafio de neón
Todas las madrugadas
se sentaba de frente al lecho de amor hecho
de bisturí
y entre coqueteos, risas y copas
blasfemaba arpas y salterios.
Ese hombre de apariencia loca
tenía la mirada de candado y un palpitar de
camello
capaz de cortar el fuego
Ese hombre tenía
corrijo,
tiene un poblado de zanates amarillos en mi
alma
Lo amo
corrijo,
lo amé hasta el delirio
hoy que ha muerto
y solo pesa la ausencia
siento
que
embarazo mis pies de ceniza.
© Diana Espinal Meza
Etiquetas: Diana Espinal
1 comentarios:
Muchas gracias Gustavo Tisocco por tener estos espacios.
Diana Annabell Espinal Meza.
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