LA DAMA DE LA ESCOBA
a Silvia Castro
María Reiche dedicó su vida a develar el
misterio de las Líneas de Nazca, pasaba temporadas en el desierto barriendo la
pampa en busca de las figuras que hoy todos conocemos. Desde entonces se la
llama Dama de la Escoba o Dama de la Pampa
Dormía sola
bajo las estrellas
hurgaba calendarios perdidos
que brotaban
desde el fondo de la tierra
mujeres y hombres
como tubérculos
recién paridos
desde el útero del polvo
a la superficie arenosa de la existencia.
Cambió su ropa por harapos
cuna de oro
por lecho de paja
con la escoba entre sus manos
lúcida
y vidente
liberó al pasado
del paso del tiempo
desenterró animales y astros gigantescos
en la soledad de su fe.
Fue una incomprendida
tan inhumana
tan escandalosa.
No era de aquí
María
así y todo
se dejó seducir
por la piel de un continente adverso
y barrió
y barrió
hasta el último día.
Ahora es ella
también
un enigma
y una moraleja:
quien no teme
desentierra el pasado
quien no teme
lo vuelve a enterrar.
Dicen que en las noches claras
todavía se la ve
y nadie sabe
quién
la ha dibujado.
© María Casiraghi
Felicitaciones María!
ResponderEliminarFelicitaciones María!!
ResponderEliminarFelicitaciones, María! Beso!
ResponderEliminarHermoso homenaje!❤️❤️
ResponderEliminarExcelente y conmovedor. Gracias. Un beso. Adriana «Dirbi» Maggio
ResponderEliminarBellísimo poema y homenaje!
ResponderEliminarBesosss
Bellezaaaa... historia muy sensible
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ResponderEliminarQué lindo poema; " quien no teme / desentierra el pasado / quien no teme / lo vuelve a enterrar" Siempre es hermoso leerte. Besos
Lily Chavez
Muy bello poema para tan impactante realidad!
ResponderEliminarLa señora del poema sigue barriendo en tu poema... seguirá. Gracias
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