Sucede a
veces
sopla un
viento sobre todas las cosas
hemos
vuelto inocentes del largo recorrido
bendecidos
infantes, salvados por el fuego
tiempo
cíclico; ritos de iniciación que se renuevan
he aquí el
milagro, la llama que no cesa
el fuego eterno.
© Raquel Jaduszliwer
Esplendente fuego tu palabra Raquel. Alfredo Lemon desde Córdoba
ResponderEliminarMuy bueno Raquel. Griselda Rulfo
ResponderEliminarme parece un acierto el tono mítico que adpta el poema para decir cosas esenciales y hermosas, muchas gracias,
ResponderEliminarWalter Mondragón