No soy dueña de la vida
que camina a mi lado.
Ni de la muerte que espera
con el cronómetro exacto.
No deseo que se me otorgue un don tardío.
Ni perdones al final del sendero.
No sé si ya está todo dicho
o si aún faltan propósitos.
Por eso,
me siento a esperar
a la sombra del
destino
© Griselda Rulfo
Muy buen poema, invita a la reflexión.
ResponderEliminar¡Fantástico!
ResponderEliminarintenso. sin superficie! susana zazzetti.
ResponderEliminarCoincido con Susana Zazzetti, reflexión profunda, existencial, certera. Abrazo grande, Alfredo Lemon
ResponderEliminarInmenso!
ResponderEliminarFelicitaciones Griselda!Profundo poema que obliga a la reflexión.
ResponderEliminarFelicitaciones Griselda!Bello y profundo poema!
ResponderEliminarSabiduría Griselda!! Y... tenes un trozo de cielo en tu mirar!! Abrazco!!
ResponderEliminarExcelente
ResponderEliminarSabio...
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