Este
resquicio de viudez
me tiene
naufraga de pájaros.
Todos los
días
a la hora
de los buzones añosos, tiende a arrobarse de derecha a izquierda esa sensación
de solfa bermejo.
Entre el
interludio y la primicia
se pavonean
las ganas
se
encienden las bisagras, el cianuro, el canesú de ciertas ermitas exfoliantes.
Y todo
calla, ante la homilía de los sapos.
© Diana Espinal
Muchas gracias, querido Gustavo Tisocco por creara estos espacios. Recibe mi cariño, respeto y admiración de siempre.
ResponderEliminarHermosos todos los versos, me llegaron, me encantó el poema Diana. Bello, triste, con carácter, con entereza, a la vez repleto de ayer, hoy y poesía. Y ese final de "la homilía de los sapos"...
ResponderEliminartremendo trabajo he leído.
" me tiene naufraga de pájaros! que bello
ResponderEliminarUn abrazo
Graciela Barbero