Sábado 12/12/2020.
No tiene gracia
pasar el día mirando la azarosa
armonía de las gotas de lluvia en los
cristales.
Diría
: en algún momento la secuencia es tan
simple que alivia la mirada
: la arritmia de las caídas en sordina es
un silencio interior
: velado el paisaje, aún reconocemos los
verdosos perfiles
: los restos de agua son colgajos en las
piñas de los eliottis
: el aire es denso, los pájaros son
esfinges grises enramadas
: todo es una caída lenta hacia los pastos
: el sol no corrige la mañana.
Nadie hace uso del derecho a conversar,
incluso de la lluvia.
Los gestos son neutros.
La inevitable conclusión no llega nunca.
Así empiezan los finales.
El goteo es la pregunta y la respuesta.
© Mario Molfino
Excelente. Las palabras de tus versos como las gotas de la lluvia, salpican las aristas del alma y equilibran preguntas y respuestas que apenas intuímos. Gracias! Alfredo Lemon
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ResponderEliminarmUY ESTRUCTURADO Y concluyente el poema, tiene oficio de escritor.
Gracias.
Walter Mondragón
Poemón y cierre genial!!!
ResponderEliminarBesosss
¡Excelente!
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