18/12/20

Poema de Noelia Palma

 


Las cortinas grises que tejió mi madre

eran la felicidad y el remanso.

El sonido del agua contra las baldosas

nos torturaba

salvo cuando vos decías lluvia.


Lluvia. Lluvia.

¿Quién puede repetir una y otra vez

el lugar de la despedida?

 

© Noelia Palma

Etiquetas:

3 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Bravo Noelia! Cuanto más sencillas en aparencia las palabras, más nos lleva a bucear su significación profunda. Alfredo Lemon

19 de diciembre de 2020, 12:22  
Blogger Norberto Mario Barleand ha dicho...

Bello poema Noelia , la lluvia casi siempre inspira un cariño

19 de diciembre de 2020, 18:36  
Anonymous Maga tierrapapel ha dicho...

Amo. Amo. Gracias Noelia 🍉🍉🍉

20 de diciembre de 2020, 9:57  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio