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17/7/20

Poema de Mirta Venezia


  

Irredentos

no preguntar cuándo termina
el cierzo blanco se apoza en
la brújula del tiempo
arrasa los tendones de la muerte
sin llegar nunca a la luz
afuera frío de gris o nieve
azulidad
 que incendia la pavura 

hundirse  cabeza al cielo
-atrapados-
sin remedio
la tierra avanza
- lenguas de oro viejo-
sobre los campos del fuego
y no hay
             no hay salida

© Mirta Venezia

4 comentarios:

  1. categórico, sin vueltas, una bella manera de libertad, me encantó! susana zazzetti.

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  2. Poesía viva, múltiple, disponible! Aunque diga que no hay salida, está su propia luz... Alfredo Lemon

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  3. Muy bueno!!!. Un abrazo Graciela Barbero

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