Para ganar
el pan
el poeta no
encuentra
el poema en
el aire y lo caza
el poema no
es un pájaro / el poeta no
recibe
visitas clandestinas de números graciosos
que se
instalan en su egregia cabeza
iluminándola
/ el poeta es
como un
viejo minero solitario y muy terco
que
arrastrando su mula
penetra
cada día al socavón pico pala esperanza
golpe a
golpe a la piedra tras la eterna quimera
e igual que
los mineros
son muy
pocos los que dan con la dorada veta / pero
una vez y
otra vez pico pala esperanza
tras la
eterna quimera
golpe y
golpe a la piedra jornada tras jornada
pisoteando
palabras el aire enrarecido
polvo sobre
la frente
sudor lucha
trabajo / el poeta es
como el
viejo minero
que
acostumbra morirse
abrazado a
su mula a su pico a su pala.
© Carlos Patiño
(1934/2013)
Hay algo en
tus ojos
que me
duele
tal vez
porque quiero descifrarme
desentrañarme
conocerme…
© Liliana Majic
Hermosos ambos poemas. De descifrar, se trata, ya palabras, ya a quienes somos... es lo mismo. Verónica M. Capellino
ResponderEliminarCarlos Patiño, y un poema memorable. Majic, búsqueda. Felicitaciones. Marta Comelli
ResponderEliminarBello el poema de Patiño, un broche de oro el símil final: me gusta ser ese minero que muere abrazado a su mula, su pico y su pala. Y el tuyo, Liliana: sí,somos porque nos miran...eternamente desconocidos para nosotros mismos.
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