Recorrido
por la sierra de los padres
Me paro a
la orilla del lago,
las nutrias
giran en el agua,
abrazan a
sus cachorros
contra la
barriga.
Las que no
tienen
se abrazan
a sí mismas
entrelazando
los dedos
como en un
rezo.
En vano
intento preguntar
por qué son
felices,
huyen sin
decirlo.
Alrededor
mío
mariposas y
abejorros
comparten
el mismo polen.
El silencio
es el idioma,
las
palabras lo ilusorio.
© Fiorel
Rayen
Bienvenido Fiorel a este sitio que pretende difundir a poetas contemporáneos, un abz, Gus.
ResponderEliminarHermoso poema!
ResponderEliminarGracias Natalia y Gustavo ! muy contento de pertenecer a este bello blog !
ResponderEliminarBienvenida, buen poema.
ResponderEliminarAbrazo, Ana Romano.
Bienvenido! Me encantó
ResponderEliminarHermoso poema. Bienvenido con tu bello silencio de palabras poéticas. Un abrazo. Adriana Dirbi Maggio
ResponderEliminarBienvenida, sentido poema.
ResponderEliminarSaludos.
Anahí Duzevich Bezoz