EXTRAÑAMIENTO
El mundo en
el que piso
No es mi
mundo,
Respiro
Simplemente,
Me hago el
muerto;
Hago que me
sonrío
Voy y vengo
¡Que cada
quién haga lo suyo!
¡Cada cual
lo que crea!¡Lo que coja!
Por mi
parte ni pido ni convido
(nada/nadie)
No prometo
Ni espero…
Eso sí,
dejo que lleven de mí
(árbol caído)
Lo que
quieran
Lo que
puedan
Lo que
saquen.
Aunque no
los conozco;
No los he
elegido
(Nadie va
conmigo)
Nada es mío
Ni siquiera
mi rostro.
Con mis
versos conjuro
Este
extravío
Pluma en
ristre me bato,
Como
cualquier Cervantes,
Con mi
sombra;
Sigo la
senda absurda
Que me toca
Sigo
Sin
entender
(ajeno/enajenado)
Danzando en
el alambre
De los días
Sustraído
al vacío.
La poesía
me salva…
Melodía de
alas
¡Estro y
música!
© Walter Mondragón
Hermosas imágenes en un poema desgarrador... "Hago que me sonrío..." Sí, sólo el arte nos rescata de tanta tristeza.
ResponderEliminar