Poema de Marta Elena Guzmán
LADRILLOS
VIEJOS
Desde la
tonsura de la tarde
no logro
proyectar tu nombre
ni siquiera
para armar
el final de
los comienzos.
Algún
temblor, un grito contenido
un viento
frío lamiéndome las piernas
breve
halito de abril las hojas muertas.
De azul
metalizado la punta de los dedos.
Cómo se
vuelve de los nunca
cuando los
pies tan pobres
ni siquiera
el canto reconocen.
Cuando en
la luz meridiana de tus ojos
hay olor a
quemado
y tus manos
como ladrillos viejos
buscan los
retoños amarillos del naranjo.
En el
silencio están grabados los infiernos
el canto
roto, el dolor seco.
Cómo se
vuelve sin fermentar la herida
con los
sentidos clavados en la noche
y en la
espalda inclemente el aguacero.
© Marta Elena Guzmán
3 comentarios:
Qué hermoso poema! Lleno de imágenes espléndidas: las manos "como ladrillos viejos" es una imagen que me interpela muy fuertemente. Me gustó mucho tu texto, Un abrazo. Adriana Dirbi Maggio
Bello!
Flora levi
Bello!
Flora levi
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