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12/8/19

Poema de Raquel Fernández



LAS BRUJAS DEL BARRIO

Pegadas a los vidrios sucios de sus ventanas
espiaban nuestra infancia.
Eran manchas en los cristales,
manchas de ira y silencio,
aunque a veces soltaban algún ladrido
y nosotros temblábamos.
Las brujas del barrio
arrojaban pedradas de hielo
sobre el techo de nuestro paraíso
de caramelos Sugus y revistas Anteojito.
El miedo tenía su olor inconfundible
a ceniza, gato y sopa.
Si te portás mal te va a llevar la loca Ema.
Si te portás mal te va a llevar la muda.
Si te portás mal te va llevar la polaca.
Si te portás mal.

Todas las brujas del barrio eran mujeres solas.
No esperaban a un hombre con la comida caliente.
No llevaban chicos al colegio.
No organizaban reuniones para vender cosméticos Mary Kay
ni recipientes Tupperware.
Habían ignorado los mandatos atávicos
que nuestras madres cumplían con celo.
Por eso eran malas.
Por eso nos habían enseñado a reírnos de ellas
y a desconfiar de sus voces y sus ventanas.

Hace cuarenta años
el barrio era una pequeña sucursal de Salem.
Las hogueras se encendían con prejuicios.
Y las brujas ardían.


© Raquel Fernández

14 comentarios:

  1. Buenísimo, las brujas del barrio, cuántos recuerdos.

    Abrazo
    Elisabet

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  2. Excelente Poema querida Raquel!! Nos habla de los prejuicios y los miedos que inundan muchas veces la vida , no solo de los niños

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  3. Gracias, Gustavo, por la publicación. Y a vos, Eli, por tu lectura y tus palabras. Abrazos a los dos!

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  4. Un lector agradecido, Raquel, te saluda en este sábado de agosto.

    Rolando
    www.revagliatti.com

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  5. Que hermoso homenaje a las brujas del barrio!

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  6. Ohh, hermoso. Y esa foto, tan adecuada. Felicitaciones Raquel.

    Lily Chavez

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    Respuestas
    1. Gracias, Lili. Gustavo hace un hermoso trabajo ilustrando los poemas. Beso grande!

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  7. Jajaja. Tan bueno como realidad de mí época.

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  8. Ay! Esos conjuros. Nos enseñaban que todos a nuestro alrededor eran malvados. Gracias por el recuerdo.
    Besos, Raquel.

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