Deuda
Al amor le
debo todo y no puedo enamorarme
Compartir
la brisa, la primavera azul ,
Espejos
vacíos, imágenes que reposan
en linternas opacas del olvido.
Al amor le
debo todo y no puedo enamorarme
Tal
vez, la solitaria membrana de los días,
el árbol que regué en los diluvios con la
voz sutil de la inclemencia.
Las sábanas en sus blancas rutinas reclaman
el susurro
de algún beso, una lágrima,
un labio en
los brazos de la almohada.
Al amor le
debo:
Una luz en
la tibieza del otoño,
la caricia
de mi madre en la nostalgia,
y aquella
casa con atajos de ausencia.
Al amor le
debo los amigos, libre canto del
perfume y de las flores
los que
siguen en la ruta del delirio o se
fueron con violines de viento,
sin un
saludo, con un adiós de luto que obtura la sangre.
Los sigo
amando desde el arroyo de sus ojos
mansos.
Amo a mis
hijos, a los hijos de otros
padres.
Al amor le
debo todo y no puedo
enamorarme.
Pasiones y
tumultos fueron sembrando
de
brotes y cuestas el camino donde encallan
los últimos
refugios de la vida.
Que de
tanto amor que debo.
No
puedo enamorarme .
© Norberto Barleand
seguro que entre tanto tumulto está ahí cerca. miralo. susana zazzetti.
ResponderEliminarMuy buen poema, Norbwrto
ResponderEliminarHola Norberto: Un poema que emociona con ese "al amor le debo todo/y no puedo enamorarme", que va marcando un ritmo interno, no sólo en la forma sino en lo evocado desde el corazón (los amigos,la casa,los hijos). Y ese gran final donde se juega con la palabra "debo" nuevamente, y pese al no enamoramiento entendemos que sí, que todo lo dicho anteriormente es enamoramiento aunque no se lo reconozca como tal. Muy buen poema Irene Marks
ResponderEliminares muy extraño ese modo de afirmar lo contrario, de jugar a lo imposible.
ResponderEliminarmuy bien, a eso llamo yo oficio.
walter Mondragón
gracias Norberto