sin
demasiado fuego de artificio
nos amamos, sí
pero lo decimos pocas veces
sin hacer ostentación del brillo
levantamos
la cabeza
para respirar mientras nadamos
voraces pero instruidos
la masa dulce leva de a poco
tomo el té,
escribo haikus
hago florcitas de papel
no hay la urgencia de las grandes ciudades
hay un constante acariciar el lomo
de un animal perfumado
si hay hambre, que espere
soy todos los
días santa
y lenta
una trapecista que
busca con cuidado
el momento preciso para dar el salto.
© Natalia Leiderman
Hermosura!
ResponderEliminarLeve, suave ... Sin prisa.
ResponderEliminarInteresante final del poema
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