ANILLOS DE LLUVIA
Mar abierto y redondo,
rojo de brillo rojo,
agua escondida
cruzó la calle una tarde cualquiera
sin esquivar el charco del asombro.
Secreta luz de su pupila
y más secreta la vida que latía.
Esmalte de plata leve
bendijo los anillos de la dicha.
© Marita
Rodríguez-Cazaux
Cuanto encanto encuentro en la voz poética de Marita
ResponderEliminarfelicitaciones
Un encanto, como siempre!
ResponderEliminarUn maravilloso decir!!
ResponderEliminarMuchas gracias querido Gustavo Tisocco por tu generoso gesto en publicarnos. Gracias también por los comentarios mis queridos y talentosos amigos. Contagia este blog impecable nobleza y cercanía. Abrazo de todo corazón.
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