4/11/18

Poema de Elena Garritani





LA DANZA DE LA VIDA ( o  Week-end con  Edvard Munch )
                                                
              "La danza de la vida" (1899) cuadro de Edvard Munch
                                                                                               
Consume
errar como un ave rapaz  entre yelmos desangrados
 y corazas vacías: 
el humo, eterno aprendiz de formas clausuradas ,
 se desprende de un escorzo,  de un borde, de  un celaje .
  ¿traiciona la belleza del séptimo día?                          
Amó y amaré  el ocio,  abuso de la  ley del tormento:
irrumpo con un halo de gracia,  como un lirio
contra rostros severos y  patéticos
( creo que soy el centro de un ínfimo planeta)
-y me equivoco-
soy una cabeza alborotada,  un gajo,  un equívoco. 
Aunque  el destino es una sombra,   gota a gota su desmesura
se filtra en mi piel. Me elige,  mueve mis hilos
de marioneta de carne.   Me acosa con quejumbrosas espigas.
El viento me desafía sin conocerme,
 me impulsa a enfrentar la nave
que  tiñe de color oceánico  el vestido blanco,  el vestido negro,
 las flores azules, los labios rojos,
los giros apasionados de la sangre y del dolor.

Acaso la redención fría de la luna
será como desasirse de  un cuerpo de trapo de un astro muerto,
 y sentir repulsión
por ese dejo de piedad que aflora como un arrullo musical
 hacia la hoguera incesante del grito.

Fue y seré  ofrenda de mi codicia, como es ornamental guarida,
 rumor espectral, limosnas del misterio, albricias de la nada,
la danza de la vida.


© Elena Garritani

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1 comentarios:

Blogger Amalia Mercedes Abaria ha dicho...

Excelente tu poema, Elena!!! Abrazo! Amalia

6 de noviembre de 2018, 14:08  

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