¿Cómo se
mide la distancia entre su corazón
y el mío?
¿Igual que
en la placa radiográfica de un tobillo roto?
Esta vez
son gotas de nuestras vidas las que aguan
nuestros
vasos de ron en el bar del hotel.
"Nos
iremos cuando nos echen", dice.
Ya leímos
en la Universidad, tiesos ante el himno
y los
discursos, preocupados por tanta pompa (tanta tinta).
Comimos el
banquete típico, con el Rector y la vice
vestidos de
gala.
¿Cómo se
mide la distancia entre dos seres
que eligen
el naufragio en la oscuridad?
Sin luz, no
vemos a la desesperación haciendo
su tarea en
la cara del otro.
Sin luz, el
agua negra es un país a conocer,
como lo fue
la vida.
© Paulina Vinderman
Excelente poema.Felicitaciones.
ResponderEliminarAnahí Duzevich Bezoz
Gran poema, Paulina!!
ResponderEliminarBesosss
Ahhhhh cómo me gusta su poesía Paulina, me encantó este poema, marta comelli
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