Poema de Gabriela Yocco

no le temo a una muerte que me venga de frente

que me muestre los dientes como un mastín o un árbol

que me arroje sin preámbulos al austero hueco de la sombra final

no le temo a una muerte que me ataque en el pecho

que sea rayo o bala / algo que cae definitivo

en el preciso centro

temo a la desganada parsimonia del lento dolor

del otro atado al dolor lento / al lento doler del otro en mi dolor

temo odio temo

la tristeza del amado sobre mí / sobre mi carcasa indefensa

lucho sin embargo

cuerpo a cuerpo con el fantasma que se cierne sobre mi vivo osario

así / yo

la quieta

lucho contra lo que no conozco / lucho contra lo sinnombre

/vos sin nombre sos tan poderoso oh amado dolor/

la noche se acerca como otra amenaza

me ciñen sus colmillos / sus animales

nunca estuve tan desnuda en la vida / nunca fue el cuerpo

esta nave absurda esta mortaja ambulante

-hace tiempo tuve un cuerpo y hoy-

hace tiempo hubo un tiempo de columpios rotos / de tomates

arrancados del cuajo de la infancia

hace tiempo hubo un tiempo de paredes y de vasos y de batas amarillas

hace tiempo hubo un tiempo de duchas de intemperie promiscua

pero aún así yo / era dueña de mi cuerpo

lo paseaba por los jardines de la sombra del entendimiento

yo era dueña yo / era dueña de mi cuerpo

ahora lo oculto en esta propia oscuridad

la madeja sin final y sin principio / el hilo

que Ariadna no tensa ni sigue Teseo

/un minotauro rojo roe mis huesos

despierto para no irme en esos barcos con velas negras

que zarpan en el sueño/

© Gabriela Yocco