Poema de Anny Guerrini
Amor
día a día
hurgo este juego voraz
de tus perpetuas caricias en mi piel.
Revivo las brasas del último encuentro.
Tallo tu rostro en mis manos
y ellas sangran astilladas.
Me levanto en la espesura de la noche
a contemplar los espectros de mis sentidos
en cada locura cometida piel a piel
profanando la agonía de rancias habitaciones.
Inútilmente
enjuago mi cuerpo con lavanda.
No puedo quitar ese perfume
ácido y ocre
Que aguza el nudo del adiós.
© Anny Guerrini
3 comentarios:
Me encantó tu poema, estimada poeta...
Qué imágenes, Anny! Muy buen poema.
Te abrazo!
Claudia
Hermoso poema, Any, con bellas imágenes!
Abrazos.
Rosa lía
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