en el sueño la mano se dispone a tocar
la línea de la noche
su verde promesa de rama
(como vaginas de madre
a punto de parir)
en medio de la línea
de la noche
se fuga el recuerdo del sueño
(la almohada huele a rama
al despertar)
© Ana Guillot
Ana, hermosísimo poema sobre la influencia del sueño en la vida y no a la inversa. Y ahí está el olor de la esperanza. Un gran beso Isabel Llorca Bosco
ResponderEliminarInteresante paisaje poético, Ana, me gustó
ResponderEliminarAna, sumamente sugerente.
ResponderEliminarsusana
David Sorbille dijo...
ResponderEliminarExcelente poema! Un abrazo