A veces el
amor prefiere lo inaccesible,
lo que
tengo, pero oculto. Avanza
hasta las
zonas más secas de donde
ni siquiera
yo puedo traerlo de vuelta,
donde basta
una chispa para que todo arda.
Querido
mundo: que el privilegio
de ese
exceso sea sólo mío.
© Tom Maver
Me gusta este poema, hondo, intenso, sin vueltas.
ResponderEliminarClaudio Simiz
Me encanta, el exceso es un privilegio en el amor.
ResponderEliminarAbrazo
Elisabet
Basta una chispa. Un momento que se percibe.Se disfruta el exceso.
ResponderEliminarSaludos.
Claudia
Qué bien logrado, este poema se siente.
ResponderEliminarUn abrazo
Betty
preciso y conciso. hermoso poema Tom
ResponderEliminar