11/1/18

Poema de Alejandro Méndez Casariego



Kaiken

Pusiste mi rostro tras una máscara
de polvo de arroz
me untaste con silencios permanentes
quisiste
que sólo mis ojos y mis manos
tuvieran movimiento
que el viento no agitara mi ropa
ni me hicieran llorar las sucesivas muertes

pero detrás
por dentro
todo esto sucedió
y mucho más
porque la soledad y la demanda del cuerpo
urdieron perfectas rebeliones
soterradas tormentas
que estallaron a la hora precisa

a tu regreso me incliné
en falsa reverencia
escondí las manos en las mangas opuestas
cerré los ojos
y dejé de verte



© Alejandro Méndez Casariego

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7 comentarios:

Blogger Elisabet Cincotta ha dicho...

Qué maravilla de poema, todo el sufrimiento y la decisión.

Abrazo
Elisabet

11 de enero de 2018, 18:00  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Qué placer leer una obra tan de pie frente a decisiones definitas.me encanta tu estilo.susana zazzetti

12 de enero de 2018, 15:20  
Anonymous Anónimo ha dicho...

poema ceremonial
el sentimiento se expresa a través de la máscara del ritual,cariños Alejandro.
Marizel Estonllo

12 de enero de 2018, 16:35  
Blogger Ines ha dicho...

Precioso. Silencioso. Intenso. Abrazo, Inés.

13 de enero de 2018, 15:47  
Blogger MONICA ARAMENDI ha dicho...

HERMOSO PODER LEERTE. HERMOSO Y ME LLEGÓ TANTO. QUE DE TANTO RECUERDO Y BELLEZA, ME EMOCIONASTE.

14 de enero de 2018, 21:22  
Blogger Marta Rosa Brignolo ha dicho...

Hermoso! Cariños!
Marta Rosa

16 de enero de 2018, 1:46  
Anonymous Anónimo ha dicho...


este poema es también contrapoema. Me gusta su estrategia textual.
W.M.

21 de enero de 2018, 22:11  

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