MOROSO
MANANTIAL
por
fuera es del color de las cerezas
por
dentro será del de las moras
los
golpes son demasiados para que los soporte una mujer
un
hombre un niño y hasta la gata y el pez
macho
que
cuida de los huevos
para
que los soporte una mujer que es madre
con la
vida amorosamente rehecha
enormes
sus ojos miran cómo el manantial
de agua
soleada y tiempo no va a ninguna parte
se abre
una persiana también las hojas de
cristal
y se le
acerca algún recuerdo feliz: la dulzura de su peso pequeño
la
vivacidad de aquella inteligencia, el alma sensible ante los desdichados
tantos
golpes la destruyen y la morosidad la come de ansias`
ha
querido proteger y no ha podido.
con sus
pocas fuerzas mantiene alto el remolino
de los vientos
para
que no deshagan su morada
mientras
dentro el remolino de sus sangres mezcla el rojo y el azul
el
intenso dolor de una mujer deshecha tapizada de moretones y de moras
y
aunque el amor sostiene como una columna bella y fuerte
los
tatuajes de minúsculas equivocaciones
no
ayudan a olvidar y a empezar otra vez
© Isabel
Llorca Bosco
habrá que aferrarse a esa columna,intentar de nuevo la vida- muy sentido tu poema, querida isa, con la intensidad que te caracteriza. abracito. susana zazzetti.
ResponderEliminarHace unos días, en los inicios del taller de poesía en la univ. de Moreno, trabajamos poema en prosa, prosa poética y aledaños... lástima no tener en manos este hermoso texto en ese momento.
ResponderEliminarClaudio Simiz
El color de los golpes, rojo y morado en el cuerpo y en la historia de una mujer que -es posible- se rehaga. Abrazo, Inés
ResponderEliminarCuánta fortaleza y profundidad en este hermoso y cuidado poema y ese airecito sobre el final ,me encanto!
ResponderEliminarAbrazo.
Aly Corrado Mélin
Tu poema es hermoso, desde el punto de vista poético, y desde la mirada humana y afligida de tantos... Y lo que es también importante: proponés una posible salida, una esperanza a tanto moretón tatuado en el cuerpo y en el alma. Es un magnifico texto. Muchas gracias. Un abrazo. Adriana Maggio (Dirbi)
ResponderEliminarintenso poema! triste y a la vez con destellos de esperanza que se estrellan contra realidades que desconozco, pero sin duda atroces y tristes... no sé porque... me conmueve... gracias por compartirlo. un abrazo, francisco
ResponderEliminarHola Isabel: un poema sobre una realidad insoslayable visto en forma muy lograda desde el interior emocional de la víctima, desde su encierro y su sensibilidad vulnerada. Esos atisbos por la persiana traen por otra parte un hálito de esperanza. Un gran poema Irene Marks
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