Usted no sabe del ardor
de la voz que intimida
Usted no sabe de luces en el charco
de la lápida que cubre el ojo del sol
Usted habla y el sueño se cae
y todo el recorrido vuelve
al punto de partida
Usted es un cuentero de miradas
la insistencia que mantiene mi tristeza
Y ya no sé si curarme
si reclamar mis fragmentos
o tomar aire tomar vida
y demoler el caparazón
con los restos de amor que me quedan.
© Liliana Chavez
Usted si que hace magia con las palabras Chavez. Griselda Rulfo
ResponderEliminarMe intereso mis fragmentos!!!!! un abrazo de María Luisa Márquez !!!!!
ResponderEliminarQué fuerte y grande al tiempo. Mis respetos.
ResponderEliminarEstá dicho de una manera que resulta difícil sustraerse a ese usted.
ResponderEliminarQuerida amiga, bueno-bueno hallar tus palabras.
Te mando un gran abrazo
Betty
Un poema compacto, redondito, como el duro caparazón que termina trizándose, MUY,MUY BUENO, querida amiga. Un abrazo Isabel Llorca Bosco
ResponderEliminarEXCELENTE, LOGRADO, BELLAS IMÁGENES. BELLO TODO!
ResponderEliminarQué bueno, romper el caparazón con los restos de amor que me quedan! Un abrazo Graciela Barbero
ResponderEliminarQué bueno leerte, Lily. Besos
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ResponderEliminarY ahí se quedó el amor, enredado en un bello poema.
Un abrazo,
Alicia Márquez
Que fuerte ...bello Abrazos
ResponderEliminarQue fuerte ...bello Abrazos
ResponderEliminarun placer tremendo leerte!!! delicioso!!!, un beso enorme, francisco
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ResponderEliminarGracias por los mimos amigos poetas!
Lily Chavez