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16/8/17

Poema de Daniel Quintero



Autorretrato
/con oreja/

Tengo la edad del hombre que no soy.

Acaricio para que haya luz,
para no sorprenderme por mandatos infieles.
Hago ruido, espanto a esos demonios
por si el recorrido del planeta profanara allí
mi inocencia.

Acaricio para hacer la luz
para que llegue con una melodía el amanecer.

Hasta el poema me reclama, me pide explicaciones,
me quita las ganas de escribir:
ya está bueno de reproches, le digo.
No sé por qué la luz
abusa de mi paciencia con tantas palabras.

Hasta el poema me encierra, me pide la renuncia
de tanto amar que no amé
justifica mi encierro
ahora ya que el tiempo no alcanza
no hay angustia a la que rendirle referencia
a que conjugación ofrendarle culto
si ya hasta el poema está dispuesto
a vaciarme el cargador y el corazón en la cabeza.
Me queda poco en que confiar
ni siquiera apostando a alguna letra
pueda torcer el rumbo
de tanta desgracia acumulada.

No me pertenezco, no me curo de mí.
Ahora exactamente tengo la edad del hombre que no soy.

Tengo el tiempo de todo lo que desee corriendo por mis manos,
ahora mismo, este instante es infinito, es un desierto roto
que tira su paso de arena entre mis dedos y rabia.

Ya nada quedará de tanta decepción:
anécdota más, anécdota menos no altera el destino.
Mañana seré otro, otra deuda, otro incognito,
otro poeta derribado.

Ya no soy el que canta, hasta el verso me ignora,
ahora soy el tiempo inmenso que me toca.
Soy la rueda que se detuvo,
apuesto, tanto augurio, tanta diminuta geografía.

El aire me gana el verso.
Soy el cadáver que se resiste a morir.
Huele mal tanto entierro,
me delata una caricia, una sonrisa infeliz,
el beso que no di.

De amar tanto amor me riega el alma,
mañana el sol será este día, este reloj de sangre,
su pauta, su deterioro.
¿Qué va a ser de mí en la hora que no soy?

Soy un animal corrompido por el vínculo,
testigo involuntario de esta decadencia,
llevaré como amuleto atravesado en la garganta
unos de mis huesos quebrado por la poesía,
uno de esos huesos molestos
que alguna vez me tuvo en pie.

Ahora ya nada sirve
nada alcanza
nada de este paisaje iluminado.
Vuelve el viento a silbar su melodía funeraria,
inclina, limpia el mármol de la tumba que me espera,
detiene mi nombre por las dudas,
por si alguien olvidara darme enterramiento,
por si alguien recordara
no dejar mi cuerpo pudriéndose al verbo.

Ahora
me queda lo que merezco:
hago sombra en la calle
aunque no haya luz.



© Daniel Quintero 

21 comentarios:

  1. Bienvenido Daniel a este sitio que pretende difundir a poetas contemporáneos, un abz Gus...

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  2. Daniel, muy bueno. " tengo la edad del hombre que no soy"

    Abrazo
    Elisabet

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  3. ¡Bienvenido Daniel!, excelente poema. Abrazo

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  4. Tremendo Poema, no tengo palabras. Felicitaciones, Daniel,¡ Bienvenido!

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  5. Querido Daniel,admiro profundamente su poesía.Bienvenido!

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  6. Muy bueno, felicitaciones.
    Anahí Duzevich Bezoz

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  7. laura elena bermudez de tesolin16 de agosto de 2017, 21:01

    hago sombras en la calle aunque no haya luz, perfecta metáfora póeta felicitaciones

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  8. Bienvenido Daniel, tu poesía siempre me deja pensando, equilibrando luces y sombras. Sos un magnífico poeta.

    Lily Chavez

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  9. Bienvenido, sí, Daniel Quintero, y un abrazo.

    R.
    www.revagliatti.com

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  10. Bienvenido, Daniel, me resultó grato leer tu poema y pensarlo en detalles.
    Hasta la próxima, un abrazo
    Betty

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  11. Hola, Daniel!! Qué bueno leerte en este hermoso sitio, y con un poema de alto vuelo!!! Felicitaciones!!!

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  12. Bienvenido y gracias por este esplendente poema

    Silvia Loustau

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  13. Querido Daniel Quintero. Caricias de luz espantan demonios cuando el poema nos reclanma y nos desnuda. FELICITACIONES!! A seguir cantando, querido poeta.

    Olga Ferrari

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  14. Tu poesía no pasa desapercibida, invita,exige que la lea, tu poesía sabe cómo y dónde llegar aunque no haya luz.
    Abrazo!
    Claudia

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  15. ¡Increíble la fuerza de tu voz poética, Daniel!
    Felicitaciones y un fuerte abrazo de bienvenida
    María Rosa León

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  16. Está poesía. ..este autorretrato ,del hombre poema, muy bueno ,gracias!

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