Páginas

7/4/17

Poema de Graciela Perosio


cómo soportar la propia historia
el peso de todo lo que hicimos
y el de lo que no
sin poder cambiarlo y midiendo
ahora, las consecuencias
del vértigo
del miedo
o de la ineptitud
cómo soportar y soltar riendas
a ver qué hace el próximo jinete
y qué entregar aún
cuando hayamos
traspasado la montura
qué otra palabra
capaz de alquimia
o acaso de perdón
y aún así
cómo soportar
haber envejecido
          y no saber


© Graciela Perosio

13 comentarios:

  1. De alguien que se tortura haciéndose este tipo de preguntas y el soportar, cómo es que he venido pudiendo soportar, llegue mi agrado de lector de este poema.

    Rolando
    www.revagliatti.com

    *

    ResponderEliminar
  2. MARIA LUISA MARQUEZ9 de abril de 2017, 18:05

    Las incógnitas afloran debemos superarlas.Mi aafecto a tu poesía María Luisa MÁRQUEZ

    ResponderEliminar
  3. La vida es un eterno aprendizaje, donde uno tiene que tratar de alivianar la carga. Por suerte lo estoy tratando.
    Muy duro tu Poema!
    Abrazo

    ResponderEliminar
  4. Un planteo casi diario que me hago, y que tan bien expresar.

    Abrazo
    Elisabet

    ResponderEliminar
  5. Translúcido, claro como agua clara, compartido, llegar a viejo y no saber... como sabrás, es un no saber sabiendo...pero por otro lado, todo lo que un@ hizo o no hizo es lo que pudo. Así que lo mejor es no torturarse con la parafernalia del autoreproche y dedicarse a gozar porque cada segundo ya no vuelve. Un abrazo Clé.

    ResponderEliminar
  6. Hermoso Graciela!
    ...ese no saber...el misterio, alimenta la poesía, verdad?

    Abrazo grande

    ResponderEliminar
  7. Dura pregunta. Difícil, y no porque no tenga respuesta, sino porque es insoslayable. Un abrazo Graciela!! Raquel Jaduszliwer

    ResponderEliminar
  8. Aprender a soltar, a dejar fluir la vida, el día a día. Ademas demostrar qué? cada historia es única. Ni mejor ni peor. la de uno.
    Rendir examen como cuando íbamos a clase?
    la vida es entrega, sin miedos, vivir el hoy, aquí ahora y con alegría.
    No sufras. Es en vano.
    Mi cariño!!

    ResponderEliminar
  9. Les agradezco que se hayan tomado el trabajo de leer mi texto y de escribir, pero creo honestamente que están dejando de lado que es un texto con un encuadre literario. No es una carta confesional pidiendo consejos para la felicidad. Me parece necesario aclarar aunque tal vez sea yo la que esté confundida de contexto. Hace años que participo en el blog y nunca lo tomé como un desahogo personal y me parece que no es la propuesta de Gustavo.No se trata de si los consejos me gustan o no, me parece que no son pertinentes en este espacio tan generoso que se orienta hacia la Literatura.

    ResponderEliminar
  10. No diría yo, Graciela, que todos los que dejamos un comentario deslizamos, además, un consejo.

    Rolando
    *

    ResponderEliminar
  11. no, mi querido Rolando, no todos lo hicieron pero no me pareció que hubiera que puntualizar. Es sólo una opinión general. A mí me parece-por respeto a Gustavo Tisocco, especialmente- que éste es un blog literario y que debemos respetar eso. También puede ser que haya quien no lo viva así. Tal vez yo le doy demasiado importancia por mi formación crítica y a otras personas les parezca válido. La verdad no lo sé.

    ResponderEliminar
  12. Graciela, este poema reflexivo y profundo, hace que el lector se detenga, que se mire, pues va más allá de una experiencia personal.Gracias.
    Cariños
    Juany Rojas

    ResponderEliminar