Lidocaine for the soul
Aun en lo efímero hay permanencia
en pastos fugitivos, en ese perro …apuradamente felices.
El relato construye los lugares.
También el destino y el fracaso implican cierto esnobismo.
Este sentimiento de temporal crónico
de pisar botellas rotas
sin encontrar narcótico que despeje el trasnoche.
Y ahora que la casa está limpia y ordenada;
¿deberé hacer algo por esto,
qué bebería pensar?
Ansiamos como las guindas
el derecho a la claridad.
Pero nada arde.
© María Paula Alzugaray
Tan inteligente y profunda tu poesía. Abrazo, María Paula.
ResponderEliminarDistancia irónica y reveladora. Un abrazo María Paula. Raquel Jaduszliwer
ResponderEliminarInteresante y bello planteo de una realidad que aparece cruda y a su vez, narcotizada. Gracias. Abrazo!
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