Poema de Ofelia Pereyra
Has dejado
abierta
la ventana
de tu galeón
el viento
trajo en sus alas
la figura
del amor.
Tiene forma
de jilguero,
o tal vez
de picaflor,
su canto al
amanecer
es suave
caricia
como la
brisa del mar,
amalgamada
a un suspiro
te besa en
los labios
y se va sin
hacer ruido.
Sobre el
lecho vacío
quedan
huellas de batalla,
fue un
enemigo implacable,
sagaz
guerrero
en una
lucha cuerpo a cuerpo
sin más
armas
que el
sentimiento.
Se
enfurecieron las aguas
al clavarse
como dardo envenenado
la mortal
flecha de cupido.
Gimió la
profundidad
queriendo
tragarse el navío
crepitaron
las olas
y se
elevaron como una estela
hasta
fundirse con el cielo
y tus ojos
oscuros de noche,
oscuros de
nostalgia
bramaron
como el volcán
embriagados
por la ira.
En el
silencio nocturnal
tus
palabras se cubrieron
de espesa
bruma
y el nombre
amado
se borró
con la marea.
© Ofelia
Pereyra
Etiquetas: Ofelia Pereyra Nadal
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio