El corazón
en su jaula dorada
Hoy el cuarto posee
la
impaciencia de los abrazos
y una
fragancia donde las bocas siguen
su propio
ritmo de latido cardíaco
un reloj
sobre el espejo
deja
exhalar una melodía monocorde
Afrodita
con dedos infinitos
ha rozado
sus cuerpos hasta agotarlos
El olvido
su sombra persistente
entre las
paredes y ha partido
dejando rosas de vidrio
como un
presente desde la permanencia
Ella siente
que en su respiración entrecortada
ha nacido
el frio de agosto
mientras
una pierna cae en la noche
fagocitada
por el lecho
la sabana
aun repta con el perfume
de lo
prohibido
afuera una
llovizna impregnada
de pasos
desconocidos
que
transitan las miserias
sobre este
lunes distinto
siente como
la soledad
le tiende
una mano hacia el vacío
pero deja
entrar a la vida por la puerta
© Gladys
Cepeda
Muchisimas gracias Gustavo por publicarme en tu excelente revista un abrazo enorme !!!!!!!!!!!!
ResponderEliminar..."deja entrar la vida por la puerta" un placer leerte Gladys, un beso, Dolores Pombo
ResponderEliminarVencer la soledad, mensaje bellamente poético.
ResponderEliminarAbrazo
Elisabet
Muchas gracias queridas poetas por leer mi poema un cariño a ambas
ResponderEliminarGladys, qué placer de lectura, tu poema se siente.
ResponderEliminarUn abrazo
Betty
Mil gracias por tu comentario Betty
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