Poema de Walter Mondragón
LOS CICLOS DEL FUEGO
Implacable el reloj da las seis
Rompe el encantamiento
Interrumpe bruscamente el sueño
Separa los abrazos,
Es entonces cuando nos descubrimos solos
Cada cual arrojado a la arena
(del día)
Al sol que abrasa,
Devueltos de las bocas de la noche…
De la mar de los sueños
Como náufragos,
Cada quien abandonado a su suerte
(del día)
Al sol que le alumbra,
Cada uno a su asunto
(a su
dédalo)
Apenas sí atados al hilo de su olor
(o su ardor)
Cada quien en su asunto
(en su
mundo)
Ajeno o propio, hasta las seis:
Cuando volvemos a ser uno
(y
distintos)
Bajo la luz de la sombra.
© Walter Mondragón
Etiquetas: Walter Mondragón
7 comentarios:
Walter, me gustó mucho tu poema, me quedé pensando en esa interrupción que separa abrazos y en el tiempo....en el tiempo
Lily Chavez
como dos mundos, ¿ n0? antes y después. placer siempre leerte. susana zazzetti.
El reloj que interrumpe el sueño tan adecuado para el poema, con su recorrido humano bien logrado en imágenes y ese final con el broche de un excelente oxímoron. Qué bueno. Un abrazo
Betty
Versos profundos y livianos, que estremecen en su belleza.
Siempre el tiempo la gran incógnita me supera tratar de entender y vivir ese tiempo, el del sueño. Felicidades Poeta. Vic
El tiempo Walter¡ ese invento del hombre¡¡ Gran poema¡
Sonia Rabinovich
Muy bueno!
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