27/4/16

Poema de Leonor Mauvecin



LA ABUELA


La abuela ha recogido el zapallo en la huerta.
Ha pelado los choclos.
Juego a desgranarlos como pepitas de oro.
Mezclo los granos y la leche tibia
y el cuenco sabroso del zapallo los guarda.
Y a la lumbre de las brasas
al rescoldo, mi madre los cuece.

Siento alegría de fiesta esta noche.

El aroma de los frutos de la tierra invade la casa
trepa por las paredes de adobe
baila entre las vigas de quebracho.
Chispas de estrellas en el fuego
 y la abuela, en la penumbra cuenta.
Cuenta y su palabra
                  es  pan entre las brasas.


© Leonor Mauvecin

6 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

ah! la palabra de las abuelas... Abrazo. PAOLANTONIO

27 de abril de 2016, 14:04  
Anonymous Anónimo ha dicho...

muy hemodo tu poema, leono, con lol tuyos y con los frutos de la tirrtra preparados por las manos amados.
Has conseguido imàgenes que envuelven al ledpr que
la traslada a un mundo de ternura.Un beso.
isabel llorca bosco

28 de abril de 2016, 2:26  
Anonymous Anónimo ha dicho...

toda la dulzura y la intimidad de un momento hogareño. bello. susana zazzetti.

28 de abril de 2016, 14:12  
Blogger sacanueces ha dicho...

debo confesar que se me erizó la piel!!! me transportaste a ese mágico sitio donde se producía la hechicería -la buena cuenta-!!! que maravilloso todo!!! un lujo entrar en tu historia, así, como de golpe!!! gracias por compartirte tanto!!! un beso enorme, enorme amiga!!! francisco

30 de abril de 2016, 13:45  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Bello y cálido poema! Se percibe el clima. Gracias por compartirlo. Tere Vaccaro.

30 de abril de 2016, 22:16  
Blogger Susana Rozas ha dicho...

Un poema con aroma y sinestesias a granel. Bravo.

2 de mayo de 2016, 0:05  

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