barcarola
la barca duerme sucia y fría
y no se lleva bien
con mi dulzura
que es tanta
y no me cuesta mucho
¿por qué
partir ahora?
las hijas ya se fueron
y justo que regresa el agua
es tiempo de mirar la tierra
con ojos de azafrán
tuviste veinte años para estar a solas
(pequeña ingratitud:
leí tres marcas en mis manos
no vi las tuyas)
pero esta barca es demasiado fría
y somos dos luceros
sin pestañas
que van de flor en flor
© Silvia Rodríguez Ares
Imagen enviada por la autora del poema
ResponderEliminarQué melancólicamente cierto este bello poema, Silvia.
Un abrazo.
Alicia Márquez
Muy lindo, Silvia! Un beso grande!
ResponderEliminarjm
Bello Silvia!
ResponderEliminarVi y sentí esa "barca"..., la partida, tus ojos de azafrán, los dos luceros...
Un abrazo grande
Muchas gracias!!
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