Agua bendita
hasta donde voy cuando digo acá
y allá se me va el líquido horizonte
a dónde el camino que transparenta
el río indescifrable y en la voz quiebra
lo más tierno del árbol
a dónde las alas de las mariposas sin refugio
las leves antenas
patitas que aletean sin fuga ni destino
a dónde el cuarto vacío
y el libro en la mesa de luz
a dónde la mano en la noche
al despertar sin esmalte ni anillos
las uñas desnudas
el susurro de las piedras muertas
donde los ojos van
© Norma Starke
..."donde los ojos van" muy bueno! Un abrazo, Dolores Pombo
ResponderEliminarMe gustó mucho!!!! Esos adónde...todas interrogaciones que quedan en el aire del poema. Abrazo, Inés Legarreta.
ResponderEliminar"mariposas sin refugio""
ResponderEliminarbello!!!!!! un places leerte.Flora
ResponderEliminarPor suerte el poema quedó adonde el alma lo recibe con alegría.
Un abrazo.
Alicia Márquez