Mujeres
Cuando cae la noche
sobre los cristales
y sobre los lápices.
Cuando el árbol pierde
su cuerpo
y desborda sombra
sobre las raíces.
Cuando las abejas liban
sangre
como mosquitos,
y los guerratenientes
juegan a los dados
con los ojos de los perseguidos
(ahora ven,
ahora no ven,
ahora nos ven).
Cuando la vida y la muerte
corrompen el aire.
Cuando callan los números
y los astros
y los dioses
y no hay voz que dibuje
la forma desconocida
de la confianza.
Ellas cavan un cauce
en el desierto
y se hacen río
antes de que salga el sol.
© Adriana Maggio
ResponderEliminarLindo poema Adriana. Felicidades y que tengas un maravilloso 2016
Lily Chavez
Buen poema, invertebrado y grave.
ResponderEliminarprecioso, adriana, esta continuidad enumerativa elegida con tanta exquisitez, da gusta leerla. susana zazzetti.
ResponderEliminarMe encanta su intensidad y belleza. Con tu permiso lo pondré en mi blog Masticar rabia
ResponderEliminarGracias, Griselda. Por supuesto que tenés mi permiso para publicarlo. Es un honor. Abrazo. Adriana Maggio
ResponderEliminarMuy buen poema con una gran intensidad.
ResponderEliminarUn abrazo Ana Romano
Bello!!!!!
ResponderEliminarFlora
ResponderEliminarUn poema tan femenino que lastima por su belleza y verdad.
Abrazo grande.
Alicia Márquez
EN LA NOCHE QUE LOS HOMBRES USAN PARA EL HORROR, LAS MUJERES LA APROVECHAN, "!FECUNDAS EN RECURSOSª, DADORAS DE LA VIDA
ResponderEliminarPienso que el arte es también una generalización que tiene por objeto el salto y la mano con oficio, independiente de la verdad. _Allí se pega el deseo. Es bellísimo y refrescante, Ádriana, como ese río que sorprende a la mañana. Un gran beso Isabel Llorca Bosco
maravilloso!!! es una exquisitez!!! gracias por compartirlo, francisco
ResponderEliminarDavid Sorbille dijo...
ResponderEliminarEstupendo poema!! Un abrazo