31/12/14

Poema de Lidia Cristina Carrizo


Cuando anochezca 

Hoy que la mirada,
no es de quien yo amo.
Hoy me encuentro muy lejana. 

Porque se fragua así mi sangre
quemándome imposibles allí donde
mis comisuras se aquietan sin sonrisas.
Sólo beben silencios y sombras

cuando la noche crea sus fantasmas.


¿Es que pido imposibles..digo yo, cuando anochezca
el día o después, cuando mis ojos no se encuentren distantes,
mire los tuyos,que recorren mi tiempo,como si fuésemos
sólo simples amantes? 

Sin tener que elegirnos y el asombro ya se asome en mis
negros ojos, vuelvan a brillar como hace tanto tiempo,
entonces vendrás en una noche inmensamente nuestra
y el olor a cielo abierto esté en el aire! 

Volvamos a sonreir sin contrato.  Ya  amanece.


© Lidia Cristina Carrizo

4 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Lidia, este poema lleno de nostalgia y tristeza infinita desde la herrumbre del dolor que cancela la sonrisa, demuestra en ese sublime final que la resurrección es posible, y posible de nuevo la mirada que rescata la sonrisa
en nueva dimensión, fortalecida.
Un final con aplausos de pié en ese amanecer
Ignacio

31 de diciembre de 2014, 17:44  
Anonymous jorgepablomoreno. ha dicho...

Un transito amoroso, que florece en su belleza y se redime en el amanecer. Buen poema.

Jorge pablo moreno.

3 de enero de 2015, 8:17  
Blogger Liliana ha dicho...

Volvamos a sonreir sin contrato, claro. Un buen 2015 para vos Lidia.

Lily Chavez

4 de enero de 2015, 12:12  
Anonymous Anónimo ha dicho...

El amanecer en tu poema coincide con el amanecer de este nuevo año, Lidia y eso no es poco: es todo un anticipo de esperanza.
Aplausos, bises y besos
María rosa León

5 de enero de 2015, 19:02  

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