Poema de Claudia Tejeda
Ensayo
Imagino al hijo del vendedor de barriletes
dueño provisorio del cielo
en el humo de luz
entre
la cola de trapo y el hilo oblicuo
a escondidas elevando
un polígono de alboroto.
Mercancía certificada
y aprobada por los pájaros.
Todos tienen una prueba de viento
antes del pregón y la demanda.
El niño empresario del aire
sabe
que las monedas no se pueden remontar.
© Claudia Tejeda
Etiquetas: Claudia Tejeda
9 comentarios:
Tu poesía es mágica amiga y te transporta hasta todos los prados de la ternura, la ensoñación, la dulce sensación de volver a la infancia. Hermosoooooooooooooooo
delicioso!!! de grave levedad que te penetra el alma!!!
gracias, gracias por compartir tanto!!! un beso, francisco
imposible no valorarte como exquisita poeta claudia porque tu estilo altamente literario define con dulzura la vida. susana zazzetti.
¡Por favor! ¡Qué buenísimo poema Claudia!!! Es absolutamente terso y tiene imágenes certeras y maravillosas como que las monedas no se pueden remontar, dueño provisorio del cielo en el humo de luz... polígono de alboroto. ¡Qué placer!
Abrazo
Alicia Márquez
Claudia tu poesía es muy bella y mas aún cuándo se remonta a la infancia como esta que me llenó de recuerdos
maria elena tolosa
Claudia tu poesía es bella y mas aún cuándo se remonta a la infancia como esta que me emocionó mucho
maria elena tolosa
Qué delicia leer este poema, levantar la vista y hallar esas imágenes descriptas para disfrutar la luz de cada día.
Un abrazo
Betty
Tierno, evocativo, mágico poema.
Belleza remontada.
Abrazo
Alicia Perrig
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