13/8/14

Poema de Ricardo Juan Benítez


El canto del adulto

                “Cuando el niño era niño,
                  era el tiempo de estas preguntas:
                 ¿Por qué yo soy yo y no soy tú?
                 ¿Por qué estoy aquí y por qué no allí?
                 ¿Cuándo empezó el tiempo y dónde acaba el espacio?
                 ¿Es la vida bajo el sol tan sólo un sueño?
                 ¿Es lo que veo y oigo y huelo,
                 sólo una ilusión de un mundo antes del mundo?
                 Vistas las acciones del Mal y de la gente,
                 ¿existe realmente la maldad?
                 ¿Cómo es posible que yo, que soy quien soy,
                  no haya sido antes de existir
                  y que algún día yo, que soy quien soy,
                  deje ya de ser quién soy?”
                  (Lied Vom Kiedsein/ Canción de la infancia/
                  Song of childhood/ de Peter Handke)


Cuando el niño fue adulto
aún era tiempo de preguntas
con escasas respuestas:
¿Por qué yo quiero ser tú?
¿Por qué cuando estoy aquí quiero estar allá?
¿Cuándo se acaba mi tiempo?
¿Dónde comienza mi espacio?
¿Son mis quimeras más reales que la vida?


¿La existencia del Mal me revela el Bien?
¿Yo soy lo que soy aún antes de haberlo sido?
¿Dejaré de ser lo que soy para ser otro?
¿Alguna vez fui otro para ser este que soy?
¿La esencia de la vida es la incertidumbre?
¿Volveré a ser el niño que fui?
¿Aquel estanque el mar de mi lejana infancia?
Una mar surcada por navíos de papel
derivando sin dudas a lo inexplorado…    


© Ricardo Juan Benítez

7 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Claro es difícil saber, en todo caso existió alguna vez la nada ?

maria elena tolosa

14 de agosto de 2014, 12:14  
Anonymous Anónimo ha dicho...

El niño o la niña que fuimos siempre nos acompaña, besos, amigo querido, María Chapp

15 de agosto de 2014, 21:07  
Blogger Unknown ha dicho...

Preguntas que se responden, a medida que pasan los años y el espíritu de uno lo lleva a indagar, a explorar un camino que irá mostrando cada duda, incógnita, advertencia, despertar. Es maravilloso evolucionar, darse cuenta.
Gracias Ricardo, el poema me encantó-
Un cariño

16 de agosto de 2014, 22:42  
Blogger Anamaria Mayol ha dicho...

El niño interno está siempre...Interesante profundo el poema Gracias

18 de agosto de 2014, 19:33  
Anonymous Anónimo ha dicho...

David Sorbille dijo...
Las preguntas que encierra la vida misma. Un poema notable! Un abrazo

19 de agosto de 2014, 22:19  
Blogger Elisabet Cincotta ha dicho...

Las cuestiones que la vida nos hace en este indagar. Muy buen poema.

Abrazos
Elisabet

20 de agosto de 2014, 19:32  
Blogger María Sonia Quevedo Hoyos ha dicho...

Esta genialidad de infante es única.
Fueron muchas las preguntas sin respuesta o respuestas a medias camufladas.
Recibe mi saludo poeta.

5 de septiembre de 2014, 17:45  

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