12/7/14

Poema de Susana Zazzetti




jugábamos  a la ronda.
al gallito ciego.
saltábamos la cuerda
en el patio.
en los recreos.
escuchábamos una infancia de lluvia
los brazos bajo la nuca
como si nada.
sin saber
que después
manotazos inesperados
iban a llenarnos de estrías
el alma.


© Susana Zazzetti

25 comentarios:

Blogger Migdalia B. Mansilla R. ha dicho...

Susana, me encantó leerte y esa real vida tan bien dibujada en versos.
Abrazos.

12 de julio de 2014, 16:01  
Anonymous Anónimo ha dicho...

"escuchábamos una infancia de lluvia" :hermoso
saludos
Anahí d.Bezoz

12 de julio de 2014, 16:59  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Muy emotivo Susana, esa infancia feliz ,despreocupada y después todo se derrumba sin saber porqué
abrazo

maria elena tolosa

12 de julio de 2014, 17:07  
Anonymous MILAGROS RODRÍGUEZ ha dicho...

Por supuestro Susana cada estria marca el camino de algún aprendizage Un poema profundo!

12 de julio de 2014, 18:05  
Anonymous betty badaui ha dicho...

Susana, leer este poema con su calidez y su rudeza tan bien enfrentadas me deja con la hermosa sensación de la palabra bien dicha que se yergue sobre las estrías del alma..
Un abracito
Betty

12 de julio de 2014, 21:05  
Blogger Liliana ha dicho...

Hermoso poema que describe con exactitud el devenir de nuestras vidas.

13 de julio de 2014, 9:09  
Anonymous Ivana Szac ha dicho...

Susana:
Excelente el clima que genera el poema, muy buenas metáforas y sorprendente el final. Me gustó mucho.Felicitaciones como siempre!

13 de julio de 2014, 15:42  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Un poema real, dicho como vos sabés hacerlo. Lindo leerte.
Un abrazo

Lily Chavez

13 de julio de 2014, 19:36  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Susana algunos manotazos inesperados
los esquivamos, otros no,son las leyes universales del azar, pero
toda esa infancia gloriosa que con
tanta maestría dibujás, es de una belleza radiante por la dulzura que guarda la memoria
Espléndido
Ignacio

13 de julio de 2014, 20:40  
Anonymous Pauli ha dicho...

Las estrías del alma...cuánto más profundas que las del cuerpo, Susana! Y no hay crema que las borre...

14 de julio de 2014, 13:34  
Anonymous Anónimo ha dicho...

... alguien podría pensar "arrugas" ... pero no ... es "estrías" ... el insustituible valor de cada palabra !!! ... Me encantó
Muchas gracias, Susana
Un abrazo
Lía Miersch

14 de julio de 2014, 23:12  
Blogger Isabel ha dicho...

Tus poemas, Susana, que toman unas pocas cosas simples y esenciales parecen brotar "como si nada".Pero tu saber logra un ámbito lúdico y placentero, unas notas que han quedado en el alma, marcada por esos golpes de la adultez. Y empleás la palabra "manotazos¨
para no salir del todo del ámbito del juego aquel, tan distinto. Un abrazo Isabel Llorca Bosco

15 de julio de 2014, 3:16  
Blogger Mónica Angelino ha dicho...

Susana, querida ese último verso es impactante.

Besosssssss

15 de julio de 2014, 16:46  
Anonymous Anónimo ha dicho...

por esa infancia de lluvia...gracias!

maria del mar

16 de julio de 2014, 14:08  
Anonymous Anónimo ha dicho...

"Las estrías del alma" cuentan con poemas como el tuyo. Y se alivian "como si nada"
Felicidades Su!!
Cecilia Ortiz

16 de julio de 2014, 14:31  
Anonymous Anónimo ha dicho...


Un poema que se yergue desde lo gestual y abreva en el arca rilkeana de la infancia.
Tierno y emotivo en su base, como un niño dormido que va creciendo hasta el "manotazo" final, cuando despierta y ya es adulto.
Felicitaciones


Elisa Dejistani

16 de julio de 2014, 21:02  
Anonymous Griselda Rulfo ha dicho...

Como dice Ivana: "Felicitaciones como siempre"

21 de julio de 2014, 11:06  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Excelente manera de expresar, de recorrer y explotar ne las emociones.


besos muchos.

Cariños

Cynthia Rascovsky

23 de julio de 2014, 14:38  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Una infancia vestida de recuerdos
ue llena el alma!!!!!!María Luisa Márquez

26 de julio de 2014, 14:43  
Blogger María Sonia Quevedo Hoyos ha dicho...

Poema lleno de momentos bellos y un dejo de tristeza.

26 de julio de 2014, 21:20  
Blogger Rosa Lía Cuello ha dicho...

Lindo poema,"los brazos bajo la nuca/como si nada"...la infancia y la inocencia...y después las estrías en el alma. Abrazos
Rosa Lía

27 de julio de 2014, 21:27  
Anonymous Anónimo ha dicho...

"El niño es padre del hombre!, dijo Wordsworth. Y somos eso: recuerdos hilados en poesía. Abrazo. PAOLANTONIO

28 de julio de 2014, 14:29  
Blogger Leonor Mauvecin ha dicho...

Precioso poema .Conmueve y nos deja tantear esas estías que todos llevamos a cuestas . Un abrazo

28 de julio de 2014, 16:10  
Anonymous Anónimo ha dicho...

A fuerza de ser vos, sentimos que esa niña somos todos los que leemos el poema. Solo que tuya es la palabra justa, pensada.
Pero lo que más seduce es ese lugar profundo de tu ser en el que te sentaste a escribirlo. Como toda tu poesía, Susy.
Susana Giraudo

29 de julio de 2014, 11:10  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Ternura de la infancia, bajo la lluvia, y estrías en el alma que se gestan al crecer. Impecable.
Abrazos
Maria Cristina Fervier

30 de julio de 2014, 22:43  

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