5/7/14

Poema de María Elena Tolosa


Esa mujer
           tiene el rostro
         opaco
           gris como pizarra.
Debe estar muerta,
           pero camina,
a lo mejor los muertos lo hacen
y no se inmutan,

su expresión ensombrece la calle
¿habrá perdido algo?
¿ o podrían fusilarla
        cómo a un desertor?

No he vuelto a verla,
recordarla me estremece
      Al pasar me miró a los ojos
     son iguales a los míos
¿acaso no estaría yo frente al espejo?


© María Elena Tolosa

7 comentarios:

Blogger maria alicia ha dicho...

Depende tan sólo de vos, amiga mía, que tu imagen sea ésa frente al espejo, o que cambie para descubrirte en el rostro de una mujer decidida a ser otra...Me gustó.Profundo, inquietante...

5 de julio de 2014, 13:34  
Anonymous Griselda Rulfo ha dicho...

Una mirada interesante. Gracias por compartir

6 de julio de 2014, 22:44  
Blogger Unknown ha dicho...

- Ser testigo de uno mismo - es todo un aprendizaje.
Muy bien logrado, sin duda.
Abrazo

9 de julio de 2014, 0:25  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Poema que dice profundidades y te hace reflexionar enteramente, bravo!!!!
con cariño María Luisa Márquez

12 de julio de 2014, 23:29  
Blogger Mónica Angelino ha dicho...

guauuuu,!!!
Ese espejo: !dios!

Besossssss

15 de julio de 2014, 17:00  
Blogger María Sonia Quevedo Hoyos ha dicho...

Profunda reflexión, un gran poema.

26 de julio de 2014, 21:35  
Blogger Ricardo Juan Benítez ha dicho...

Poema reflexivo, muy bien construído.

27 de julio de 2014, 9:52  

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