30/7/14
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11 comentarios:
Vaya... cuántas cosas dichas en un puñado de líneas... me impactó.
Claudio Simiz
pensé lo mismo que claudio: un todo en pocas palabras dicho con hondura
y un estilo concreto, impecable. susana zazzetti.
impactante sobre todo el final "...porque uno es el arquitecto de su propio destino" decía el poeta!... un abrazo lidiacc.
Querida Irene,
hay en esta síntesis una gran hondura, un recóndito deseo de reencuentro con la propia sustancia, una suerte de metamorfosis que parte de las aguas primordiales y a su vez pensantes. El conocimiento del propio microcosmos en relación con la naturaleza, siempre imponente, con sus ríos, divinidades sagradas, y por lo mismo sus imágenes nos hablan de una fuerza generadora y del transcurso irreversible del tiempo. Todo ello conjugado con la influencia de la luna, a la que Píndaro llamaba "el ojo de la noche" y Horacio, "reina del silencio". Un magnífico poema, con sugerencias y múltiples lecturas que lo tornan aún más interesante.
Cariños
Elisa Dejistani
La finitud y su misterio , muy bien expresados en este bello poema
Me encanta tu poesía, la foto elegida en este caso es muy acertada. Bellísimo
Lily Chavez
Gélido y muy bien escrito poema, amiga. Abrazos. Gastón Sequeira.
Me impactó el final del poema y me conmovió enormemente el verso del comienzo...impecables!
Me llevó a muchas preguntas dentro de mí misma,a mútiples lecturas.
Los monstruos nunca estuvieron afuera del corazón, siempre nos han acechado, amenazado desde adentro,tan cerca...
Impacta tu trabajo Irene y con tanta brevedad.
Gracias por compartirlo!!
Un abrazo
Hilda Díaz
Me gustó mucho tu poema, gracias! Dolores Pombo
Irene, no digo que es perfecto para no cerarlo, pero la conjunción del
!,espejo de la muerte", las lágrimas, el río y el" agua pensativa", que abarca más de un sentido demuestra a la poeta que sos.Pleno. Un beso enorme.
Isabel Llorca Bosco
Impecable tu poema!
Un discernimiento de lujo.
Un abrazo enorme.
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