VERDADES DE BUENOS AIRES
Ponete tu rostro de calle.
Así, fruncílo así
y salí a la calle a tiznar también vos
lo que de Buenos Aires te toca.
Salí al lleva y trae
al dame y te doy de estos grises.
Verás.
Esas plantitas que crecen
sobre los techos de los quioscos
de diarios, donde nadie limpia
ni limpió,
esa plantita es la verdad de Buenos Aires.
Esa paloma, plumífero efímero,
sin nombre ni número,
esa paloma en los zócalos
es la verdad de Buenos Aires.
Vos no sos la verdad de Buenos Aires.
Harán falta años, tantos pasillos angostos
llenos de puertas
que duela el calzado o se pierda
y camines como paloma y crezcas
del herrumbre
como plantita de quiosco y digas
verdades dichas por radio
y calles
un secreto a voces porteñas
de Buenos Aires.
Voces de pasillos angostos llenos de cámaras
y que aunque nadie vea las cintas
sepas que hay cámaras en todos los pasillos,
que hay oídos detrás de todas las puertas,
hay sirenas detrás de todas las ventanas
en todas las siestas,
hay vergüenzas detrás de cada vidriera,
hay villas miseria detrás de los aeropuertos,
de los estadios de futbol,
hay vidrio molido en todas las carnes
que mordés,
en todas las carnes que sos sin ser
la verdad de Buenos Aires.
© Daniel Chao
¡Bravo! por esa mirada sobre Bs.As.
ResponderEliminarExcelente descripción y tristemente cierta. Abrazo, Daniel
ResponderEliminarMirar donde no se pone la vista, donde no brilla, la pertenencia en serio, identitaria. Tiene la belleza y el gustito amargo y descarnado. Gracias, Daniel.
ResponderEliminarDaniel:
ResponderEliminarHola! Muy buenas imágenes y descripciones de nuestra ciudad de Buenos Aires. Saludos.