La dejaron
en la puerta de su casa
como a un perro
que se abandona.
Estaba allí
con su maleta,
sola
mirando la tarde de otoño
que marcaba otro tiempo.
Después
subió las escaleras
como siempre
© María Elena Tolosa
Cuánta desolación.
ResponderEliminarY como siempre seguimos avante a pesar de la cercanía de otoño.
ResponderEliminarAbrazos
David Rosales
bello, bello!!! pero que tremenda sugerencia se desliza… da para mucho
ResponderEliminargracias por compartir este poema, es muy bello
francisco
Bello pese al desamparo que transmite.
ResponderEliminarLily Chavez
como siempre, la vida presiona para resistir los otoños. Bella síntesis, casi una receta: qué hacer antelas piedras que se cruzan en el camino, gracias por este poema, Marta Ortiz
ResponderEliminarNo puedo decir que es mi favorito porque admiro toda tu poesía, Marieta, querida, pero qué bueno volver a leer este poema maravilloso.
ResponderEliminarTe quiero
Abrazo
Alicia Perrig
un poema que nos infunde coraje, fortaleza, ante los contratiempos de l vida, saludos
ResponderEliminarAnahi Duzevich Bezoz