Desde la tinta
“era un pacto firmado con la sangre de cada pesadilla,
una simulación de durmientes que roen el peligro en un hueso
de insomnio.”
Olga Orozco
me devora el poema
muerde lentamente los
tejidos
las palabras pretenden dibujar el contorno
competir con la mano
que investiga
se ramifica
el deseo
hasta en los huesos
la ropa queda a un lado
testimonio de un pretérito imperfecto
puedo viajar por el pasaje donde la luz niega el secreto
recorrer huecos y aristas sin hartarme
y hasta podría simular la entrega
si fuera necesaria
una mentira.
© Graciela Bucci
un comienzo y un final decoran el intermedio de una expresión cuidada y bellísima. susana zazzetti.
ResponderEliminarMuy buenos versos, graves en sus construcción y su profundidad. Y contundente en su final.
ResponderEliminarJORGE PABLO MORENO.
Precioso Graciela, como seimpre tu estilo bien femenino e impecable, besos. Sonia Del Papa Ferraro
ResponderEliminarGraciela, un poema que encierra un fino erotismo oculto expresado con
ResponderEliminarcuidado, y un final...impactante
Hermoso poema
Ignacio
Bello poema con un certero final.
ResponderEliminarAbrazo Graciela
Alicia Borgogno
Un poema a medida de la sutileza.
ResponderEliminarBien Graciela!!
Lily Chavez
Un poema a medida de la sutileza.
ResponderEliminarBien Graciela!!
Lily Chavez
Bello poema, delicado y con un final contundente
ResponderEliminarAbrazo
Elisabet
ResponderEliminarEste poema no podía haber sido escrito por alguien que no fuera mujer, de tantos estrógenos que exuda.
¡Maravilloso!
Abrazo,
Alicia Márquez
UN BELLÍSIMO POEMA !...SUTILES FIGURAS DEJAN ESE ALO IMANTADO DEL SER EXQUISITO! ALGO BELLO !... ME GUSTÓ LEERLO VARIAS VECES. MI ABRAZO POETA! LIDIACC.
ResponderEliminarDavid Sorbille dijo...
ResponderEliminarMagistral poema!! Un abrazo