PIEDAD
Detrás de todos mis versos,
detrás de todos mis llantos,
de mis risas y mis cantos,
estás tú, amor perverso,
mi último y primer amor.
Porque nunca a nadie amé,
porque nunca a nadie quise,
porque nadie fue el señor
de todos mis pensamientos,
de mi pena y mi dolor.
Nunca supe de verdad
que detrás de tanto amor,
detrás de tanto tormento
hubiera tanta piedad.
© Celina Vautier
¡Qué maravilla tu poema, Celina!
ResponderEliminarEn tan pocas palabras sintetizadas la grandeza y la pobreza del amor.
Aplausos repetidos y un beso grande
María Rosa León
un balance del AMOR esgrafiado en palabras, un saludo de Maria Luisa Marquez
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