Otro día más que se va
Otro día más que se va.
Otro día sin Ella.
Era como el capullo naciente
de una rosa esplendorosa
embelleciendo la mañana.
Era la misma vida
hermosa y alegre
como los sueños de primavera.
Pero de un tajo la muerte
me dejó el tallo y las
espinas.
Ahora sólo tengo recuerdos
que acompañan mis horas
de solitario desconsuelo.
© David Rosario Sorbille
David, no puedo agregar mucho, un poema triste que tendra su tiempo de pesar. Un abrazo
ResponderEliminarpatricia corrales
El corazón al desnudo en esta poesía.
ResponderEliminarDavid Sorbille dijo...
ResponderEliminarGracias en nombre de mi Padre. Un abrazo
CUÁNTO DOLOR,AMIGO, EN UN BELLO POEMA. TE ABRAZO.
ResponderEliminarBESOSSSS