Otro Mar
en todo este mar de sangre
mar de amar
mar de mujer
mar amargo
otro mar
mar de playas escondidas
y de piel
en todo este mar rojo y blanco
me ahogo entre las margaritas sangrientas
de la luna
en esta lumbre mortal de carne
lumbre lúgubre
lumbre de labores
lumbre lasciva
lumbre lujosa de saliva
lumbre que alumbra lumbre
lumbre de otros mares
mares rojizos del ocaso
sembrados por lo que termina
en esta lumbre me acurruco
entre el hueso y la rebelde médula
fabricadora de mundos milagros milenios martirios
y un retorno a la virginidad.
© Lorena Wolfman
Lorena:
ResponderEliminarEn tu poema hay un murmullo murmurante y magico que reinventa lo conocido como el rojo que remite a mujer. Me gusta mucho el juego de aliteraciones y el cierre, que viene a reiniciar otro ciclo en ascenso.
Un abrazo
Carmen Amato
Ese mar, de imágenes donde el rojo nos conduce, y nos lleva, imágenes de dolor, de "milagros milenios martirios", como una plegaria unánime del cosmos, donde la fuerza anafórica y el juego con los sonidos nos sumergen.¿Resarcimiento por esos milenios de dolor? Ese "retorno a la virginidad" como la infancia perdida. Excelente Ireme Marks
ResponderEliminarQué bello Lorena...!
ResponderEliminarTu rojo atardecer, la lumbre de este poema es maravillosa.
Gracias por compartirlo!
Un abrazo
Montse Bertrán