LOSSAT
Cuando llegué a
Lossat
los rascacielos
palidecían
contra un cielo
violeta.
Lo primero que vi
fue una arteria
abierta hacia la
nada.
Luego calles y
calles
con nombres de
asesinos
y algún semáforo
siempre rojo
por la sangre de
las víctimas.
En una esquina me
detuve a mirar
una niña que
meditaba
y me quedé a su
lado
haciendo lo que
ella hacía.
La madre de la
niña
nos llevó adentro
de la casa
y nos sirvió un
té
acompañado de
bizcochos con miel.
Me dijo que podía
quedarme en Lossat
si me
acostumbraba a la muerte
y a los
simulacros.
Yo no soy lo que
soy –dijo-
sino una metáfora
de la espera
así como mi
esposo
es la encarnación
del miedo
y esta niña, hija
del miedo y de la espera,
es sólo la cara
hueca de la angustia
y aquella iglesia
de esplendorosa nave
es el cuartel
general de los ateos.
La interrumpí de
pronto
y me encontré
diciéndole:
¡Qué ricos están
estos bizcochos!
No son bizcochos
-agregó-
sólo veneno.
© Jorge Luis
Estrella
Amigo, mi entrañable amigo. Sabés como disfruto de tu comicidad, de tu humor, pero cuando me enfrento a estos textos me quedo paralizada ante las imágenes, cada línea desprende una reflexión y me maravillo. Felicitaciones, un excelente poema.
ResponderEliminarLily
Amigo, mi entrañable amigo. Sabés como disfruto de tu comicidad, de tu humor, pero cuando me enfrento a estos textos me quedo paralizada ante las imágenes, cada línea desprende una reflexión y me maravillo. Felicitaciones, un excelente poema.
ResponderEliminarLily
muy fuerte, muy hondo el mensaje. entre tanta dureza, la imagen de la niña: la infancia es siempre inocencia y amor. me conmoviste, jorge. maravillosa la imagen que eligió gustavo. abracito. susana zazzetti.
ResponderEliminarUuuuuaaaauuuuuuu!!!!
ResponderEliminarTerribleeeee!
Maquiavélico!
No puedo hacer comentarios. Sólo me quedé pensando....
Celina
Jorge, me pasa siempre que te leo, no puedo parar y se que me sorprende gratamente, un abrazo
ResponderEliminarpatricia corrales
Un poema para pensar, lleno de audaces reflexiones me gustó mucho
ResponderEliminarmaria elena tolosa
una arteria abierta hacia la nada...
ResponderEliminarincreíble imagen...besos querido
Querido Jorge, tanto dice tu poema...el sin sentido de la vida en las ciudades...sus calles con nombres de asesinos...nadie es quien cree o parece ser...nada es lo que parece ser, las galletitas de miel...son veneno...enloquecedora pérdida de confianza, locura, desesperanza y sin embargo la niña...la ternura allí donde el espanto...un abrazo, María Chapp
ResponderEliminarque genio!!, por las dudas, no quiero biscochos!!
ResponderEliminarsaludos
Anahí Duzevich Bezoz
ResponderEliminarLa muerte y los simulacros. Los padecemos todos los días.
Magnífico poema, Jorge.
Un abrazo,
Alicia Márquez
JORGE, el poema que es una espera truculenta que va in crescendo hacia los bizcochos, al final. Si me permitís, gran poeta, me parecen demasiadas notas truculentas (como los semáfgoros) Ël principio es bellísimo, como dicen los comentadores y la ilustración de Gus, me parece, es un acompañamiento increíble lleno de admiración. Hay situaciones que parecen imposibles hasta que se las vive. Que la vena no conduzca hacia la nada sino a la sangre vital para vivir en paz. Y nos hace pensar en esa espera que constituye el poema y que se puede hacer todo lo oscura que se quiera. Un abrazo de
ResponderEliminarIsabel Llorca Bosco
Yo tampoco quiero bizcochos Genioooo!!!
ResponderEliminarNo sé donde queda Lossat, tampoco importa mucho, es bella y terrible la condición de aceptar la muerte y los simulacros y la cotidianeidad de los bizcochos de miel, me remontó a los bombardeos en oriente medio y me
ResponderEliminarconmovió el poema, creo que es el primero tuyo que leo y me gusta mucho Jorge
Jorge:
ResponderEliminarCreo que has inventado la novela policiaco-poetica. Me encanta tu poe-novela deliciosamente irónica.
Con un abrazo
Carmen Amato
Tantos años de conocerte y todavía no sabría afirmar si lo tuyo es puro juego o posición trágica disfrazada de humor irreverente. De todos modos soy tu lector empedernido y seguidor como perro de sulki...
ResponderEliminarFuerte profundo y bellamente doloroso Gracias Me encanta TU POESÍA Un abrazo desde el sur
ResponderEliminarProfundo doloroso y bello poema poblado de imágenes muy fuertes...Me encata TU POESÍA Gracias
ResponderEliminarMe gustó mucho este poema, lleno de dolor e ironía y a la vez tanto lirismo.Abrazos
ResponderEliminarrosa lía
Increíble texto!!! Maravilloso!!! Me erizó la piel , que es lo que busco siempre que leo poesía. Extraordinario poeta y aberrante realidad. Un abrazo, querido amigo. Un abrazo. Gastón Sequeira
ResponderEliminarUna pregunta: con las vainillas y el matecosido ¿todo bien?
ResponderEliminarGran poema ,amigo!!
Besossssssss
Maravilloso! Lossat acá a la vuelta, en cualquier rincón del mundo,en este texto de personajes con llagas.Muy intensas las imagenes, muy buenooo! Felicitaciones Poeta!
ResponderEliminarAlicia Corrado Mélin
Un poema excelso en su construcción, que nos lleva del llanto a la risa en un instante, ese instante bendito en el que nos enfrentamos a los oscuros espejos de esa otredad que nos reclama hacer valer el fuego de nuestra condición humana, en medio de tanto caos e indiferencia.
ResponderEliminarALVARO BALTAZAR CHANONA YZA.
Excelente poema, sorprendente.
ResponderEliminarDavid A. Sorbille dijo...
ResponderEliminarGenial como siempre, Jorge! Un abrazo
Muy bueno, Jorge. Está elaborado con maestría. Me hizo acordar al Reino del revés de M. El Walsh, pero con lenguaje más crudo y adulto. Un gran texto. Un abrazo. Adriana Maggio
ResponderEliminarQuerido Jorge me deleité leyendo todos tus poemas, cada uno de ellos me sorprendió, son oníricos dentro de un realismo coloquial, cada persona vive una mitología propia,una trama interior donde los sueños , rituales y vivencias e imaginación nos llevan a contactarnos con los arquetipos más profundos que subyacen en nosotros y que se expresan en vos maravillosamente en un lenguaje creativo con cierto abordaje junguiano, te admiro y agradezco haberte conocido...Anny Guerrini
ResponderEliminarQue mas que decirle mi admiración y cariño de siempre...
ResponderEliminarabrazo inmenso querido poeta.
muak.
Querido Jorge Luis,
ResponderEliminaradhiero desde ya a los aplausos y admiración de los amigos que me precedieron; solamente agrego para enfatizar, que leerte es siempre una aventura, se trata de iniciar una travesía y dejarse llevar por la magia de tu palabra que se abre en múltiples sugerencias e imágenes de gran contraste y lucidez, en las que no falta el humor, la fina ironía y el alegato inteligente.
Gracias.
Un abrazo grande,
Elisa Dejistani