VISION DE LA NOCHE
Saliendo de la noche dura
en un silencio de siglos
entre ondas se estiró la tierra.
La madruga se hizo espacio.
Bocas partidas en sangre
diente contra diente se toparon.
Helados cuerpos
sobre un mar sin música
conformaron un eclipse de sol.
Saliendo de la noche dura
en un silencio de siglos
entre ondas se estiró la tierra.
La madruga se hizo espacio.
Bocas partidas en sangre
diente contra diente se toparon.
Helados cuerpos
sobre un mar sin música
conformaron un eclipse de sol.
© Irene Zava
Qué bello Laura ese eclipse de sol... gracias por compartir como siempre!
ResponderEliminarSiento la música en el eclipse de sol. Bello poema Irene. Un beso. Miguel Madrid.
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